En bici

Ya tengo bici. De segunda mano y el sillín está algo roto, pero bici a pesar de todo.
Por primera vez en mi vida puedo moverme en bicicleta por la ciudad. Siempre he tenido una en casa, pero la usaba para ir al parque o para salir al monte, nunca como medio de transporte. Ayer la saqué por primera vez y me fui a comprar un candado con un amigo, para que uno vigilase las bicicletas mientras los comprábamos. Me pasé medio día con la bici. Y tengo que decir que voy a usarla todos los días. Sólo le veo ventajas. Aquí todo el mundo va con bici, con lo cual no hay mucho peligro con los coches. Además, las distancias que tengo que recorrer son justo las adecuadas para no llegar sudada a los sitios. Y si son demasiado largas, está permitido subir con la bici al tren. Encima, es más ejercicio al día, que nunca viene mal. Y no contaminan.
Así que a partir de ahora iré en bici a la compra, a la piscina, a trabajar y a clase, aunque esté a cinco minutos andando de mi casa, pero por sacarla un rato. Eso sí, tendré que acostumbrarme a ir en bici por ciudad, porque el tema peatones no lo tengo muy dominado. Poco a poco.